SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El pasado 24 de diciembre no todas las personas tuvieron el privilegio de disfrutar una cena de Nochebuena y en familia, probablemente eso vuelva a ocurrir este sábado 31.
A continuación verá solo algunos casos de quienes se pasaron esas horas en el desamparo de la noche, porque no tienen los recursos ni con quien cenar, una de las caras de la desigualdad social.
Con no más que 57 pesos en los bolsillos, “Carlos” no su nombre real, conserva la esperanza de completar una suma que le alcance para comer algo esa noche.
Dedicados a sus faenas cual si fuera un día cualquiera del año, ignoran el momento que pasa el resto del mundo en familia, porque están lejos o no la tienen.
No menos penoso es el caso de los demás, cuyos bolsillos solo tienen la intención de que en pocas horas el estomago no este en las mismas condiciones.
A plena hora de la tradicional cena, siendo las 9:30 de la noche, en las avenidas Abraham Lincoln, Churchill, 27 de Febrero y Sarasota la historia se repetía, jóvenes que pretendían buscar el diario cuando el flujo de samaritanos no les favorecía por la considerable reducción de transito.
Nos confiesan que más que comer, reúnen algo de dinero para pagar la noche en una pensión que les da albergue, cuando no lo hacen en los bancos de las isletas, si es que agentes policiales los dejan dormir, como denuncia “Ramón”, quien sufrió un accidente que le afectó la cabeza hace varios años.
Esponja y agua en manos, sean ramos de flores o gorritos u otros accesorios para venta, estas personas permanecen en las esquinas en momentos en que otros ni se inmutan por su necesidad y no siempre corren con la suerte de obtener la limosna que esperan.
Este sábado, si a la hora de la cena ve en la calle una persona con un perfil de indigente, no dude en ofrecer su ayuda, que probablemente usted este presenciando un caso similar.
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