Tuesday, November 29, 2011

Noticias detalle ECONOMIA En el país no existe una estructura salarial en el cual se pueda ubicar el rango de ingresos que percibe un individuo de acuerdo a su profesión. Más bien este tema está regulado por los vaivenes de oferta y demanda del mercado y la discrecionalidad En República Dominicana cualquier chiripero gana más que un profesional


En República Dominicana cualquier chiripero gana más que un profesionalSANTO DOMINGO, República Dominicana.- Concluir sus estudios y luego encontrar un empleo con una remuneración adecuada ejerciendo su carrera es el legítimo sueño de todo estudiante universitario.

Sin embargo, tras graduarse, un alto porcentaje de estos nuevos profesionales se encontrará con la cruda realidad del mercado laboral de nuestro país, el cual solo les permitirá conseguir un empleo en el que obtendrán ingresos similares y a veces hasta más bajos a los que reciben personas que se dedican a distintas labores u oficios, para los cuales no se requiere ninguna preparación universitaria.
Así lo expone Nuria Piera en una historia que publicó en su programa de investigación periodística.
“Seiscientos dólares es lo que gana un médico, posiblemente uno de los salarios más deprimidos en el ambito de la salud en el continente americano en Occidente”, dice el doctor Senén Caba, presidente saliente del Colegio Médico Dominicano (CMD).
Este salario de 600 dólares, según compara Nuria, equivale a unos 23 mil pesos mensuales. Es decir, que un médico que tuvo que permanecer por lo menos 6 años estudiando en una universidad para conseguir su título, recibe un sueldo similar o menor a los ingresos que, por ejemplo, puede generar al mes un hojalatero, quien para aprender dicho oficio no tuvo necesidad ni siquiera de asistir a un instituto técnico.
“Nosotros somos parte de la artesanía, nosotros el sueldo oscila entre 25 y 30 mil al mes”, dice el hojalatero José Orlando Sarita.
La lista de los trabajadores informales que generan ingresos que rondan o superan los 20 mil pesos mensuales es bastante larga, pasando desde motoconchistas y fruteros hasta parqueadores de vehículos.
“Seiscientos dólares es lo que gana un médico, posiblemente uno de los salarios más deprimidos en el ambito de la salud en el continente americano en Occidente”
Raul Hierro, motoconchista, dijo: “Ahora mismo estamos conchando, tu sabe, el empleo que aparece lo que pagan son chelitos, aquí uno más o menos pica 500 o 600 pesos y uno se defiende con eso”.
Para Fernando de la Cruz, vendedor de frutas, el mes salía alrededor de 15 ó 20. “Yo vendía alrededor de 4 mil pesos o 4 mil y pico diario”.
En el área de los profesionales de la ingeniería la situación no puede ser más grave. Esther Morillo, secretaria general del Colegio Dominicano de Ingenieros y Arquitectos (Codia), considera como inaceptables los niveles de salario que están recibiendo muchos de los afiliados de este colegio.
“La verdad es que es triste ver que un profesional, por ejemplo de la agronomía, gane hasta 7 mil pesos de sueldo. En los diferentes ministerios los sueldos no sobrepasan los 20 mil pesos mensuales”, dice Morillo.
Y agrega: “Hay mucha desmotivación, mucha frustración, haber dedicado tantos años de estudio y de estudio forzado, de amanecidas completas para entregar trabajos en la universidad y luego tenemos esta realidad”.
Lo cierto es que resulta chocante pasarse cuatro años o más en las aulas universitarias y luego tener que enfrentarse con este desalentador panorama en el cual se desenvuelven la mayoría de las profesiones en la República Dominicana.
Por esta razón es que en la actualidad, el CODIA se encuentra en el proceso de presionar para que el Congreso de la República apruebe un proyecto de ley que de entrar en vigencia, incrementaría de manera sustancial el salario de los ingenieros, arquitectos, agrimensores y otros profesionales agrupados en este gremio.
Hay una coincidencia entre la arquitecta Esther Morillo y el doctor Senén Caba: mejor salario para los afiliados a esos gremios. Ella cree que ingenieros y arquitectos deberían ganar, por lo menos, 60 mil pesos al mes. Él considera que los médicos deben ganar de 80 a 100 mil pesos como promedio para el nivel de exigencia que le exige el propio medio.
Sin embargo, la realidad es diametralmente opuesta a esta aspiración y por eso es que no pasa mucho tiempo sin que los sectores profesionales de los cuales el Estado es el principal empleador, como los médicos y los profesores, levanten sus voces para exigir mejorías salariales.
Al igual que en el caso de los profesionales, los ingresos que generan aquellos que se dedican a trabajos informales, varían de acuerdo a la actividad que realizan. Entre los oficios más rentables se pueden destacar el de peluquería, ebanistería, hojalatería y maestría de construcción, en los cuales es posible generar un ingreso promedio que ronda los 30 mil pesos mensuales.
Juan Pablo Coronado, ebanista, cuenta que hay veces que al mes que le entran 2 y 3 trabajos, en esos 3 trabajos se puede ganar 25 mil pesos, 27 mil pesos. Mientras, Víctor Manuel Nova Hiraldo, peluquero, analiza que “diario vienen saliendo mil, mil 200 si esta buena la cosa...promedia 30, 35 más o menos”.
En adición, en muchas empresas se da el caso de que no existe un escalafón salarial y por ejemplo, un profesional devenga el mismo sueldo que el mensajero de la compañía.
No son pocos los casos en que los egresados de las universidades sienten vergüenza de revelar el monto del salario que reciben. Esta realidad es la que obliga a un gran número de profesionales a dedicarse a labores totalmente divorciadas de sus ambitos de estudio.
Raúl Núñez Hidalgo, periodista dedicado a tapizar muebles, dice: “¿Cómo yo me sostengo? ¿Cómo sostengo a mi pareja? tú me entiendes, ¿cómo sostengo mis necesidades con un mísero sueldo que todos sabemos que es lo que proporciona?....no te pagan lo que tú te mereces cuando también es una carrera que te exige una buena vestimenta, una buena formación, una buena presencia que todo eso cuesta.
Otros profesionales, aunque no se dedican a un oficio propiamente dicho, si han preferido sacrificar el ejercicio de sus carreras, pues han tenido la suerte de conseguir empleos bien remunerados donde no es necesario aplicar los conocimientos que adquieron en la universidad.
Claudio Lespier, administrador de empresas, terminó trabajando en un área distinta a la suya. “Bueno el sueldo era bastante llamativo, por eso fue que empece a involucrarme en ese ambiente aparte de que para trabajar en un Call Center no se necesita experiencia previa”.
Uno de los elementos que más influye en que el mercado laboral dominicano no genere suficientes puestos de trabajo de buen nivel salarial, es que nuestras universidades están graduando una importante cantidad de profesionales en carreras de las cuales ya está saturado el mercado laboral. Ante esto, el ministro de Trabajo propone la aplicación de medidas radicales.
Francisco Dominguez Brito, ministro de Trabajo, propone que las universidades, en especial la estatal, renueve totalmente su oferta hacia los jóvenes y ponga una serie de restricciones a carreras que en este momento no son necesarias para el desarrollo productivo y que al final los egresados de esas carreras no van a tener un empleo de calidad con buen salario.
Las estadísticas oficiales, que hablan de un nivel de desempleo de un 14%, el cual se dispara hasta el 34% en los segmentos más jóvenes de la sociedad, se presenta como otro escollo que lleva a nuestros profesionales a conformarse con bajos sueldos.
Madeline Medrano, estudiante de derecho, espera ganar “de 20 mil en adelante, 19 mil, 15, pesos, yo creo que 15 en adelante sería lo más correcto”.
En el país no existe una estructura salarial en el cual se pueda ubicar el rango de ingresos que percibe un individuo de acuerdo a su profesión. Más bien este tema está regulado por los vaivenes de oferta y demanda del mercado y la discreción de las empresas.
Lo cierto es que hasta tanto no se priorice la formación de profesionales y técnicos de acuerdo a las verdaderas necesidades de la nación y además, que tanto el Estado como la clase empresarial tomen conciencia en torno a que lo más importante en la sociedad y en cualquier institución es su capital humano, seguiremos graduando profesionales que conseguirán un trabajo, sencillamente para seguir pasando trabajo...y esto si es que logran conseguir el empleo.

de Acento.com.do

0 Comentarios:

Post a Comment

Compartir

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More