Se desconocía de inmediato si los rehenes murieron a manos de los rebeldes o durante la operación de rescate emprendida el domingo por la noche en un opulento vecindario de la capital.
El incidente dio inicio cuando los milicianos, que llevaban chalecos bomba y estaban armados con granadas, atacaron la bolsa de valores al anochecer del domingo.
Los insurgentes se dirigieron después a la Iglesia de Nuestra Señora de la Salvación, la cual se ubica cerca y es uno de los principales lugares de adoración católicos de Bagdad. Los milicianos tuvieron a unas 120 personas como rehenes durante unas cuatro horas.
En el baño de sangre, 52 personas murieron y 67 resultaron heridas, dijo el ministro adjunto del Interior, general de división Hussein Ali Kamal. Las autoridades dijeron que al menos un sacerdote y 10 policías figuran entre los muertos. Gran parte de los heridos fueron mujeres.
Un miembro cristiano del parlamento describió el lunes la operación de rescate como "nada profesional" y afirmó que "fue una acción precipitada que impulsó a los terroristas a asesinar a los feligreses".
"No tenemos un panorama claro de si los fieles murieron por las balas que dispararon las fuerzas de seguridad o a manos de los terroristas, pero lo que sí sabemos es que la mayoría murieron cuando las fuerzas de seguridad lanzaron su asalto contra la iglesia", dijo Younadem Kana.
Un video tomado desde un avión robot estadounidense que voló sobre el lugar durante el asalto mostró una columna de humo negro seguida de destellos desde el interior del lugar antes de lo que pareció ser el momento cuando los soldados ingresaron.
Las fuerzas estadounidenses a menudo proporcionan apoyo aéreo a las fuerzas iraquíes que realizan operaciones en tierra, a las cuales facilitan videograbaciones captadas por sus naves aéreas.
La cifra de muertos y heridos fue confirmada por la Policía y autoridades de hospitales, donde fueron llevados los muertos y heridos.
Había versiones distintas sobre el número de agresores que irrumpieron en la iglesia. El portavoz militar de Bagdad, general de división Qassim al-Moussawi, dijo el domingo por la noche que las fuerzas de seguridad mataron a ocho rebeldes, mientras que los militares estadounidenses afirmaron que murieron entre cinco y siete.
Dos policías en el lugar dijeron que tres agresores fueron muertos y siete arrestados al término de la operación.
El lunes por la mañana, afuera de la iglesia católica, Raed Hadi estaba recargado sobre su automóvil, en cuyo toldo llevaba un féretro con el cadáver de su primo muerto en el asalto.
Hadi aguardaba que la Policía le permitiera ingresar en el recinto para inhumar a su pariente. Hadi censuró a las autoridades iraquíes.
"Fue una matanza lo que ocurrió ahí, están limpiando", dijo Hadi. "Nosotros, los cristianos, no tenemos protección suficiente. ¿Qué voy a hacer? ¿Irme y pedir asilo?", preguntó.
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Los periodista de The Associated Press Sinan Salaheddin en Bagdad y Sameer N. Yacoub en Amán, Jordania, contribuyeron para este despacho.
Fuente: yahoo noticias
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